Santiago de Cuba es la segunda ciudad más grande de Cuba y un histórico y tesoro cultural. La ciudad es a menudo considerada como la raíz de la Revolución Cubana, y los numerosos museos aquí rememoran eventos clave de este importante período de la historia de Cuba.
A diferencia de Trinidad Santiago de Cuba, que parece congelada en el tiempo, mezcla arquitectura moderna y desarrollos industriales con sus coloridas gemas coloniales y su fortaleza histórica. Esta bulliciosa metrópolis también alberga una de las universidades más destacadas del país, lo que le da un toque joven y vibrante.
Formada por su rica mezcla de culturas y herencia afrocaribeña, a menudo se dice que la ciudad es la ciudad más caribeña del país. Hoy, puedes experimentar este ambiente multicultural en la música ecléctica, la arquitectura diversa, las galerías de arte y los festivales animados. Los hoteles en Santiago de Cuba también reflejan la rica cultura e historia de la ciudad, desde grandes propiedades de estilo colonial hasta encantadoras casas de huéspedes.
Los viajes cortos a las atracciones cercanas también son atractivos desde aquí. No muy lejos de la ciudad, puedes visitar un famoso lugar de peregrinación o caminar hasta la cima de una cumbre rocosa para disfrutar de unas vistas inspiradoras de los picos envueltos en niebla. Descubra más lugares para visitar en esta ciudad histórica y sus alrededores con nuestra lista de las principales atracciones y cosas para hacer en Santiago de Cuba.
1. Castillo de San Pedro de la Roca del Morro
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el Castillo del Morro goza de la reputación de ser una de las fortalezas españolas mejor conservadas del siglo XVII. La enorme fortaleza, a la entrada de la Bahía de Santiago, se encuentra a unos 10 kilómetros al suroeste de Santiago de Cuba.
Ubicada en lo alto de un acantilado, la estructura tardó décadas en construirse y finalmente se completó a fines de el siglo XVII. El ingeniero italiano Giovanni Battista Antonelli diseñó los planos originales en 1587, aunque la construcción no comenzó hasta después de casi 45 años.
El Castillo de San Pedro del Morro originalmente estaba destinado a proteger contra los ataques piratas, pero también sirvió como un prisión a finales de 1700 antes de volver a convertirse en una fortaleza.
Hoy, esta elegante fortaleza está abierta al público y contiene un pequeño museo naval con exposiciones sobre la piratería y la historia de la zona. Después de explorar la fortaleza, diríjase al restaurante de la azotea y la terraza, donde podrá disfrutar de impresionantes vistas de la bahía.
El mejor momento para visitar la fortaleza es aproximadamente una hora antes de la puesta del sol, lo que da tiempo para explorar la fuerte y tomar algunas fotos antes de la ceremonia del disparo de cañones al atardecer.
Alojamiento: dónde alojarse en Santiago de Cuba
2. Parque Céspedes
En el corazón de la ciudad, el Parque Céspedes es un excelente punto de partida para visitas turísticas. Muchos de los edificios más notables de Santiago de Cuba rodean la plaza, incluyendo la Casa de Diego Velázquez y la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción(Catedral de Nuestra Señora de la Asunción).
Aunque el Parque Céspedes es más una plaza que un parque, es un lugar de encuentro popular para lugareños y turistas a cualquier hora del día o de la noche. La música llena el aire y prevalece un sentimiento animado. También es un gran lugar para relajarse con un café o una bebida fría y ver pasar el mundo.
Visitas individuales en Santiago de Cuba
3. Catedral de Nuestra Señora de la Asunción
No te puedes perder esta magnífica estructura. La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, que adorna el lado sur del Parque Céspedes, es uno de los monumentos más llamativos y uno de los mejores lugares para visitar alrededor de esta bulliciosa plaza.
La iglesia se completó en 1526 y, gracias a los ataques piratas, los terremotos y las renovaciones, ha sufrido muchas reconstrucciones a lo largo de los años. En 1958, se convirtió en monumento nacional de Cuba. Más recientemente, el huracán Sandy dañó partes de los edificios.
La impresionante fachada cuenta con dos altos campanarios y estatuas de mármol que se asoman desde nichos. Mire hacia arriba para admirar al arcángel Miguel, encaramado entre las torres, antes de entrar.
En el interior, los aspectos más destacados incluyen el exquisito techo abovedado azul y blanco, hermosos frescos y la sillería del coro tallada a mano. También puede explorar el Museo Eclesiástico, con una serie de piezas de arte religioso y partituras musicales sacras.
Antes de partir, asegúrese de subir a la torre y disfrutar de hermosas vistas de la ciudad.
4. Cementerio de Santa Ifigenia (Cementerio de Santa Ifigenia)
El Cementerio de Santa Ifigenia en Santiago de Cuba alberga los restos de algunas de las figuras militares más famosas de Cuba, así como de personas adineradas y notorias.
Algunos de los monumentos que marcan las tumbas son espectaculares obras de arte. Una de las características más impresionantes del cementerio es el Mausoleo de José Martí. Esta enorme estructura se eleva sobre los alrededores y fue diseñada para permitir la entrada de un chorro de luz durante las horas de la mañana.
El Cementerio de Santa Ifigenia también contiene las tumbas de Carlos Manuel de Céspedes, Emilio Bacardí y Frank País. Cubanos famosos todavía están siendo enterrados aquí, incluido el músico Compay Segundo, quien fue enterrado aquí en 2003. Cada 30 minutos, se lleva a cabo una ceremonia de cambio de guardia. Las guías son muy recomendables para arrojar luz sobre toda la historia aquí.
5. Casa de Diego Velázquez (Museo de Ambiente Histórico Cubano)
Presidiendo el Parque Céspedes, la Casa de Diego Velázquez ofrece una visión fascinante de la antigua residencia de un conquistador español. Construido a principios del siglo XVI, se cree que el edificio es la residencia más antigua de Cuba y ahora alberga el Museo de Ambiente Histórico Cubano.
El conquistador y gobernador, Diego Velázquez, vivía en la parte superior del casa, mientras que el nivel inferior se utilizó como fundición de oro; el horno que se usaba para fundir el oro sigue en pie. Ver los techos intrincadamente tallados, las gruesas paredes y la sólida construcción del edificio da una idea de la riqueza y el poder del imperio español.
A partir de 1965, la casa se sometió a trabajos de restauración y ahora es el Museo de Ambiente Histórico Cubano. El museo exhibe una gran colección de muebles de los siglos XVI al XIX. Cada habitación muestra un período de tiempo diferente, y las colecciones son impresionantes, con exquisita porcelana, vidrio y otros artículos para el hogar, que complementan los muebles antiguos.
Para aquellos que no hablan español, visitas guiadas en Se recomienda inglés para aprovechar al máximo una visita aquí.